El éxtasis (MDMA) se consume cada vez más en cristal y menos en pastillas. En este formato, la gente acaba tomando más que con una pastilla, explica Mireia Ventura, farmacéutica y responsable del servicio de análisis e información de Energy Control, organización que promueve el uso responsable de las drogas y que ofrece un servicio gratuito de análisis de sustancias. El éxtasis es la que más les envían. “Con la pastilla, el usuario sabe qué cantidad está tomando. El cristal es menos seguro porque es más difícil de dosificar. Se ingiere mojando el dedo y chupándolo, con lo que se acaba consumiendo más”, explica Ventura. “Algunos usuarios lo prefieren porque creen que las pastillas llevan muchos adulterantes. Pero no siempre es así, el cristal también se puede mezclar”, explica Ventura. El cristal no es más que el estado previo del MDMA antes de convertirse en pastilla. De hecho, mucha gente desconoce que es éxtasis, incluso algunos lo han rebautizado como M.
La composición de las pastillas se ha autorregulado incluso por el propio interés de los camellos. Antes, cada píldora contenía unos 100miligramos de MDMA. Ahora, un máximo de 70 miligramos. En España, el consumo de éxtasis se ha estabilizado. La OMS ha alertado sobre el aumento en países en vías de desarrollo. No para uso recreativo, sino para soportar condiciones de vida precarias.
Fuente: El Pais
La composición de las pastillas se ha autorregulado incluso por el propio interés de los camellos. Antes, cada píldora contenía unos 100miligramos de MDMA. Ahora, un máximo de 70 miligramos. En España, el consumo de éxtasis se ha estabilizado. La OMS ha alertado sobre el aumento en países en vías de desarrollo. No para uso recreativo, sino para soportar condiciones de vida precarias.
Fuente: El Pais
No hay comentarios:
Publicar un comentario